miércoles, 2 de febrero de 2011

Ser de las LÁGRIMAS

Muchos se preguntan o se han preguntado el porque ser de las lágrimas y porque eres de las lágrimas, en estos tiempos que corren para la hermandad.

La respuesta es muy sencilla, soy de las lágrimas porque es como una familia, porque es unidad, porque es pasión, porque es humildad, porque es paciencia, porque ahora es trasparencia, porque es Hermandad, porque es y será tantas cosas que el tiempo nos a hecho ver y sentir, que la persona que es de las lagrimas, morirá siendo de las lágrimas.

Esta hermandad es una Hermandad con mucha historia, aunque en la actualidad es una hermandad aun desconocida para muchos cofrades.
Una Hermandad que echo a andar en 1990 cuando procesionaba por las calles de sus barrios, San Juan y María Auxiliadora, en el año 2003 comenzó a procesionar hasta la puerta de la villa sin poder atravesar esa “barrera” al ser comisión organizadora, en 2006 procesiona por primera vez por carrera oficial como hermandad, un hecho Histórico ya que desde su fundación en 1990 hasta 2006, o lo que es lo mismo 16 años después muchos emeritenses y cofrades conocieron a esta hermandad de la ciudad.

Mucho ha cambiado esta hermandad desde entonces a la actualidad, muchas penas y glorias han pasado sus cofrades y simpatizantes.
Un cambio de menos a mas, comenzando desde abajo, sin disposición económica alguna ni subvenciones, tan solo con el sufragio de sus hermanos y colaboradores y que poco a poco y en silencio se va abriendo camino en nuestra semana santa.

Después de tanto años vividos, ahora y desde la semana santa del 2010, los que somos de las lagrimas, y por multitud de problemas y situaciones desagradables, esta hermandad trabaja, vive y esta mas viva y fuerte que nunca.
Todos los hermanos y hermanas de esta hermandad ahora podemos decir que somos más de las lágrimas que hace 2 años atrás, ahora tenemos ese sentimiento de hermandad y de unión más fuerte que nunca y eso ya nadie lo cambiara.
Los que van entrando entran ya contagiados por los que están, de ese fuerte sentimiento de hermandad, humildad, y amor por su cofradía.
Gracias a ellos y a sus colaboradores han realizado un saneamiento económico ante la situación en la que estaba metida, estando en la actualidad totalmente saneada y sin casi deudas de importancia, estando al día de pagos.

En estos momentos que institucionalmente la hermandad no esta por los mejores momentos, es cuando mas apoyos han salido entre sus hermanos y vecinos de los barrios a los que pertenece, es cuando ellos han sabido que realmente la hermandad los necesitaba con urgencia y ellos han respondido a esa palabra que siempre se ha defendido en esta cofradía, la palabra Hermandad.
Aunque los momentos institucionales no sean buenos, la hermandad funciona igual o incluso mejor que anteriormente, sigue con sus actos programados durante los 365 días del año, sigue siendo una hermandad viva durante todo el año, preocupándose de sus hermanos y siempre manteniendo esa Hermandad con ellos, que al fin y al cabo son los “dueños” de esta hermandad.

Muchos dirán que somos pobres y nos falta mucho para ser una gran hermandad, pero sin ser una hermandad con grandes pasos, sin grandes filas de nazarenos, sin una gran  economía, sin grandes riquezas, y otras cosas mas, podemos responder que somos ricos en lealtad, en humildad, en paciencia, en amor a lo que es nuestro y hemos visto nacer, en hermanamiento, en pasión por nuestras sagradas imágenes, en multitud de aspectos mas que podríamos rellenar folio y mas folios.
Todo esto y por todo lo demás, en la actualidad, nos hace decir a viva voz y con orgullo, que somos DE LAS LAGRIMAS, por que ser de las lagrimas es ser cofrade de corazón y de amor por lo que se ha luchado y visto nacer desde la nada y sin casi tener nada.

Ser de las lágrimas es un orgullo y en estos momentos aun más, podemos decir que somos una Hermandad.

Javier Dopico